Hay tres frases recientemente pronunciadas que definirán el futuro gobierno de España.
Rajoy dijo al inicio del debate, y lo repite día a día, que no habrá nuevas elecciones si se deja gobernar a la lista más votada. Es fácil suponer que, además de ser una frase de sentido común, tiene claro que el más votado será él.
Jordi Sevilla, de lo mejorcito que tiene ahora el PSOE, ha calentado la campaña electoral con un breve tuit: «Para evitar terceras elecciones, si no hay mayorías, debería dejarse gobernar al candidato que consiga mayor apoyo parlamentario”.
Tanto Rajoy como Sevilla coinciden en aparcar el concepto de mayoría absoluta y hacen bien. Si algo parece que se mantendrá en este segundo round, es el hecho de que ninguno alcanzará una mayoría para poder investirse en solitario, y la única opción será que alguno ceda para que el más, o votado o apoyado, gobierne. A pesar de la interpretación de puñalada trapera que algunos socialistas han hecho del tuit de Sevilla, entiendo que de la misma manera que aboga por dejar gobernar un PSOE con C’s, si Rajoy está solo; también posibilita que el PSOE no obstaculice un posible pacto C’s apoyando al PP.
De todos modos la frase más relevante la dijo Sánchez a Susana Griso. Textualmente comentó: “La gente me paraba en la calle y me decía: Pedro yo no te he dado mi voto para que pactes con el PP… ¿Sabes lo que me dicen ahora? Con Iglesias a ningún lado… Mis votantes tienen un cabreo con Iglesias que no te puedes imaginar”. Las tres frases conducen al mismo final: Si gana el PP gobernará el PP.
No entiendo nada. Para que gobierne Rajoy habrá hecho falta que gané dos elecciones seguidas, ¿acaso era necesario que el PSOE pudiera culpar a Podemos de que siga gobernando la derecha por no haberse sacrificado Iglesias haciendo a Sánchez Presidente? ¿Alguien me lo explica?