Un detergente desengrasante cualquiera es capaz de cargarse un porcentaje altísimo de suciedad que tenemos en nuestros hogares. Es un producto efectivo para cocinas, baños, e incluso algunos aparatos que acumulan grasa sin que lo sepamos.
El objetivo de este pequeño post es el de mostrar que los detergentes desengrasantes pueden utilizarse en cualquier punto; hasta incluso en las industrias, para dejar perfectamente limpio y libre de grasas ese lugar.
1.- En la cocina: si antes de tallar utensilios y accesorios con la fibra, les rociamos un poco de desengrasante, será mucho más fácil. Los armarios, microondas, azulejos, aluminio o madera de las ventanas, vidrios, estufa, horno, campana, tarja, piso y todos los estantes de la cocina quedarán limpios si por lo menos una vez a la semana le rociamos detergente desengrasante al hacer una buena limpieza.
2.- En el baño: los armarios, repisas, azulejos, lavamanos y suelos, quedarán limpios y desinfectados al rociar el desengrasante.
3.- En las persianas y ventanas de cualquier habitación del hogar.
4.- También se puede utilizar para la lavadora y en la limpieza de sartenes, horno y olla.
5.- En el entorno de las fábricas, se utiliza también un desengrasante industrial, que acaba con el más mínimo problema en cualquier de las maquinas.
En definitiva; que un buen detergente nos puede sacar de cualquier aprieto y dejar los elementos donde se aplica perfectamente limpios, sin tener que realizar un gran esfuerzo.