Es difícil encontrar en España alguien que no sea capaz de repetir los argumentos del PSOE de Pedro Sánchez sobre por qué «no, es no». Meses y meses de repetir lo mismo y solo lo mismo, dejan huella indeleble y quizás hasta los hagan creíbles. Todo la argumentación del personaje socialista es que los que votaron al PSOE, no votaron al PP; evidente. También añade que todos los que no votaron al PP, votaron contra el PP: más discutible. Y al final concluye el intelectual de la rosa, que todos los que votaron contra el PP pueden unirse pero nadie puede unirse legitimando al PP: de psiquiatra. Para qué discutirlo. Basta sustituir PP por PSOE para que el mismo, en cualquier playa de las que ha estado, mirando al mar se de cuenta de la tontería expresada.
Algo falla en mi cabeza cuando pienso en el interés del no perenne del PSOE. Si lo analizo pensando en España, no tiene ni pies ni cabeza el hacer repetir unas elecciones hasta que el resultado sea de mi agrado. Si lo analizo pensando en el PSOE, es una oportunidad perdida el no dejar formar gobierno a un partido con una minoría tan exigua, que desde el primer minuto estaría al albur de la oposición socialista; sería un gobierno pelele y el chollo de los chollos para el partido de Sánchez.
No entiendo nada, si Sánchez deja gobernar a Rajoy con la minoría que tiene lo tendría amargado desde el primer día obligándole incluso a legislar lo que no está escrito, ¿Por qué no aprovecha esta circunstancia Sánchez? ¿No será que Sánchez solo va a la suya y que su objetivo es seguir liderando al PSOE y eso, mientras no haya gobierno, no hay quien lo cambie? ¿Alguien me lo explica?