He aquí algunas cosas realmente sencillas que puedes hacer y que acabarán reduciendo la cantidad total de carne que consumes semanalmente.
Y no te preocupes, seguirás disfrutando de la carne, sólo que en menor cantidad. Por eso es importante contar con buenos distribuidores de carne.
1. APÚNTATE AL LUNES SIN CARNE
Meatless Monday es un movimiento que anima a la gente a no comer carne los lunes. Inscríbete en su página web para recibir boletines semanales llenos de consejos e historias.
También hay una gran cantidad de información, recetas y noticias relacionadas con la reducción del consumo de carne en su página web – llénate las botas.
Cuéntaselo a todo el mundo. Publícalo en Facebook. Tuitea sobre ello. Anota en tu agenda un recordatorio para cada lunes por la mañana. Cuanta más gente se lo cuente, más probable será que lo cumpla de forma regular y que realmente coma menos carne.
2. COMPRA UN LIBRO DE COCINA VEGETARIANA, BASADA EN PLANTAS O CRUDA
Hay literalmente miles de libros de cocina con recetas que no contienen carne. Una rápida búsqueda en Amazon arrojó 10620 libros de cocina vegetariana, 9594 vegana, 1819 cruda y 733 basada en plantas.
Tener un libro de cocina a mano ayuda cuando no estás motivado para cocinar sin carne, o simplemente quieres volver a tus recetas habituales que contienen carne.
Una rápida ojeada a un buen libro de cocina pondrá en marcha tus papilas gustativas y te dará un montón de ideas para platos en los que probablemente no habrías pensado de otro modo.
Para los chefs y los fanáticos de la cocina, los libros de cocina le ofrecen inspiración, nuevas recetas que probar y formas de ampliar su repertorio culinario. Desafíate a ti mismo y comprueba cuántos de los libros de cocina puedes cocinar a tu manera.
3. HAZ UN PLAN PARA COMER MENOS CARNE
Es muy difícil eliminar la carne de las comidas sin planearlo. Como dijo una vez un sabio, «no planificar es planificar el fracaso».
Ya no estamos en los años 40, la planificación de las comidas no tiene por qué ser una tarea pesada, especialmente si tienes nuevas recetas que quieres probar.
Lo importante es asegurarse de planificar con antelación para no acabar con la nevera vacía y recurrir a tu menú favorito de comida para llevar.