Las pymes tienen la oportunidad de acudir en 2018 al MAB y al MARF para ganar tamaño
Las empresas medianas y pequeñas han tenido un fuerte protagonismo en la Bolsa en 2017, con revalorizaciones muy superiores a las grandes compañías cotizadas, y es previsible que el año que comienza suponga un impulso importante para la financiación de las pymes de forma que puedan salir de las tribulaciones que sufrieron en la crisis a la hora de encontrar recursos financieros para sus necesidades y, en muchas ocasiones, para su propia supervivencia.
Ha llegado, pues el momento de que las medianas y pequeñas empresas aprovechen esta coyuntura para mejorar y equilibrar sus canales de financiación, combinando la financiación bancaria con otras fuentes de recursos financieros, que les permita un desahogo a la hora de disponer de financiación para acometer las reformas y proyectos que resultan hoy imprescindibles para colocarse de cara al futuro en una posición competitiva, especialmente en lo que se refiere a su transformación digital y la necesidad de crecer y ganar tamaño.
Las pymes deben mejorar y combinar sus fuentes de financiación en 2018 para crecer y para su transformación digital
Es una realidad incontestable que la empresa española tiene que ganar en dimensión. Si en Alemania el 60% del tejido empresarial lo constituyen empresas de más de 50 empleados, esa categoría en España alcanza solo el 40%.
Es el único sistema para poder operar en el exterior en el presente, máxime cuando muchas de las compañías que nacen hoy en los países con los que competimos se centran casi desde su nacimiento en un mercado global, lo que ya se denomina “born global”.
De ello va a depender en gran medida su supervivencia futura aun cuando nos encontremos en una fase expansiva del ciclo, con perspectivas favorables para los próximos dos o tres años. Ni que decir tiene que será también la única forma de evitar volver a las tribulaciones y penurias financieras en caso de que el ciclo cambie hacia una fase de menor crecimiento e incluso de recesión.
Más empresas al MAB y al MARF
En este aspecto, los mercados alternativos, el MAB y el MARF, creados en la última década específicamente para este tipo de empresas son dos instrumentos con gran virtualidad para ello.
Resulta por tanto ineludible un acercamiento de las medianas y pequeñas empresas a estas plataformas de financiación y, a la inversa, que los operadores y agentes de dichos mercados dediquen mayores recursos a dar a conocer sus capacidades y sus características, requisitos, costes y ventajas.
De hecho, uno de los principales obstáculos para que sean muchas más empresas las que se dirijan a estos mercados es la falta de información o asesoramiento para romper con la resistencia tradicional de los órganos de decisión a la hora de variar los sistemas de financiación, una cultura poco dada al cambio y la innovación que debe modificarse con una estrategia más agresiva.
Conviene estudiar otros casos en los que hay un mayor acercamiento de empresas más pequeñas a estos mercados, especialmente en Estados Unidos donde es habitual que las pymes obtengan financiación en dichos mercados.
Frente al temor a la mayor transparencia y requisitos del mercado, las ventajas de visibilidad, credibilidad y crecimiento
Es necesario romper con el temor de las pymes y medianas empresas, especialmente las menos innovadoras, a la mayor transparencia a la que obliga su salida al mercado, explicando las muchas ventajas que comporta en términos de visibilidad, credibilidad y rigor financiero y de gestión, que, adicionalmente, se traducen de inmediato en una mayor eficiencia y en un aumento del negocio y una vía para ganar tamaño.
Expansión y actividades internacionales
De hecho, un buen número de las empresas que el MAB acoge en su seno tienen un fuerte componente tecnológico y una visión más innovadora, con vocación internacional y con expectativas de crecimiento notable en los próximos años, algo a los que sin duda está ayudando su cotización en este mercado alternativo de acciones.
Por su parte, el MARF, el Mercado Alternativo de Renta Fija se ha convertido en una oportunidad para compañías de tamaño medio, el “mid market”, que buscan recursos financieros por la vía de los instrumentos de renta fija, para cumplir con diversos objetivos, entre ellos el de la expansión y la diversificación internacional, ya sea a través de activos deuda convencional para distintos plazos, bonos y pagarés, o mediante otros instrumentos como los Bonos de proyecto o los Bonos de Titulización.
http://www.guiafinem.com/2018/01/11/las-pymes-tienen-la-oportunidad-acudir-2018-al-mab-al-marf-ganar-tamano/
Las pymes tienen la oportunidad de acudir en 2018 al MAB y al MARF para ganar tamaño