LA REPÚBLICA PORTUGUESA
EL REINO DE ESPAÑA
Por Pedro Taracena Gil
La Transición de la Dictadura a la Democracia en España y Portugal, no tienen nada en común. Solamente los que siguen sin cuestionar el origen ilegítimo del Régimen del 78, son partidarios de mantener esta farsa.
Tres razones fundamentales avalan esta cuestión:
- La Revolución de los Claveles la impulsó el Movimiento de las Fuerzas Armadas y supuso una ruptura con la Dictadura Salazarista. En el caso español lejos de suponer una ruptura con el Franquismo, se hizo una “reconversión” del Franquismo. Una conversión súbita de vocación democrática.
- En Portugal se estableció de raíz una Constitución Republicana donde los militares cedieron el poder a los civiles. En España sin embargo se promulgó una Constitución, tutelada por el Capital, la Iglesia y el Ejército.
- La República Portuguesa recuperó a los exiliados que ocuparan puestos de responsabilidad política. Nadie del régimen anterior mantuvo sus puestos en el nuevo Estado de Derecho. En España fueron los mismos franquistas quienes hicieron la Transición: jueces, militares, obispos y políticos. La ponencia constitucional la hicieron Los Siete Padres de la Constitución (*): 1 PSOE, 1 PSUC y 5 de sensibilidades del franquismo. Los trabajadores, los intelectuales, los científicos y las mujeres, no fueron invitados al desarrollo de nuestra Carta Magna.
Es preciso recordar que: “España es una República democrática de trabajadores de toda clase, que se organiza en régimen de Libertad y de Justicia”. Así comenzaba la constitución de 1931.
(*) Los siete padres de la Constitución: sentados, de izquierda a derecha, Miguel Roca (CDC), Manuel Fraga Iribarne (AP, ahora PP), Gregorio Peces Barba (PSOE), Jordi Solé Tura (PCE); de pie, Gabriel Cisneros (UCD), José Pedro Pérez Llorca (UCD) y Miguel Herrero y Rodríguez de Miñón (UCD).
Banderas de Portugal y España