Si la «verdadera palabra de Dios», por ejemplo, en el Nuevo Testamento no concuerda con la «verdadera palabra de Dios» en el Antiguo Testamento, entonces esto se explica argumentando que Dios ha cambiado en parte su forma de obrar y comportarse.
No obstante, en la Biblia está escrito: «Porque yo, Jehová, no cambio.» Así está escrito, por ejemplo, en el Antiguo Testamento (Malaquías 3, 6). También en el Nuevo Testamento se lee: «Jesucristo es el mismo ayer, y hoy, y por los siglos» (Epístola a los Hebreos 13, 8). Además, la Biblia se contradice también dentro del Antiguo Testamento y dentro del Nuevo Testamento, como lo muestran las comparaciones que se darán a conocer a continuación. ¿Entonces a qué debe atenerse el lector si quiere creer en el Dios de la Biblia?
Algo indiscutible es el hecho de que los que escribieron los textos de la Biblia son los que cambiaron. Y se podría preguntar: ¿Quién los inspiró en cada caso? ¿Solo el Dios creador, al cual Jesús llamó «Padre»? ¿O también alguien más? ¿Quizás el diablo?
¡Lea y decida usted mismo cómo quiere pensar sobre esto!
1) (a) La buena Creación de Dios: Hombre y animal se alimentan de frutas Dios habla a los hombres: «Y dijo Dios: He aquí que os he dado toda planta que da semilla, que está sobre toda la tierra, y todo árbol en que hay fruto y que da semilla; os serán para comer. (Génesis 1, 29-31) (c) Poner a resguardo: Dios habría dado a los hombres después de un tiempo «mandamientos de purificación», ordenándoles qué animales a partir de ahora podían comer y cuáles no. No podían comer: camello, conejo, tejón, liebre, cerdo, todos los animales acuáticos que no tienen aletas ni escamas, águila, halcón, azor, gallinazo, milano, cuervo, avestruz, lechuza, cuco, gaviota, gavilán, búho, cisne, somormujo, ibis, calamón, pelícano, buitre, gaviota, cigüeña, garza, abubilla, murciélago, gato, oso, comadreja, ratón, rana, chacón, salamandra, lagarto, lagartija y topo. (Enumeración según el Levítico 11, 1-30) |
(b) El cambio: Después del diluvio Dios habría hablado a los hombres de otra manera: «El temor y el miedo de vosotros estarán sobre todo animal de la tierra, y sobre toda ave de los cielos, en todo lo que se mueva sobre la tierra, y en todos los peces del mar; en vuestra mano son entregados. Todo lo que se mueve y vive, os será para mantenimiento: así como las legumbres y plantas verdes, os lo he dado todo. Pero carne con su vida, que es su sangre, no comeréis.» (Génesis 9, 2-4)
En el N.T. se produce el tercer cambio. Pablo declara aquí: «De todo lo que se vende en la carnicería, comed, sin preguntar nada por motivos de conciencia; porque del Señor es la tierra y su plenitud». Pablo o uno de sus alumnos enseñan no renunciar a determinados alimentos: «Porque todo lo que Dios creó es bueno, y nada es de desecharse, si se toma con acción de gracias; porque por la palabra de Dios y por la oración es santificado». * (1ª de Timoteo 4, 4-5) |
2) Dios: Yo no he mandado sacrificios. Ellos me son una abominación Dios habla a través del profeta Oseas: «Porque misericordia quiero, y no sacrificio, y conocimiento de Dios más que holocaustos.» (Oseas 6, 6) A través del profeta Isaías habla Dios: «Hastiado estoy de holocaustos de carneros y de sebo de animales gordos; no quiero sangre de bueyes, ni de ovejas, ni de machos cabríos … el incienso me es abominación». (Isaías 1, 11-13) Y a través del profeta Jeremías habla Dios: «Así ha dicho Jehová, Dios de Israel: Añadid vuestros holocaustos sobre vuestros sacrificios, y comed la carne. Porque no hablé yo con vuestros padres, ni nada les mandé acerca de holocaustos y de víctimas el día que los saqué de la tierra de Egipto. Mas esto les mandé, diciendo: Escuchad mi voz, y seré a vosotros por Dios, y vosotros me seréis por pueblo; y andad en todo camino que os mande, para que seáis mi pueblo». (Jeremías 7, 21-23) También a través del profeta Amós habla Dios: «Aborrecí, abominé vuestras solemnidades, y no me complaceré en vuestras asambleas. Y si me ofreciereis vuestros holocaustos y vuestras ofrendas, no los recibiré, ni miraré a las ofrendas de paz de vuestros animales engordados. Quita de mí la multitud de tus cantares, pues no escucharé las salmodias de tus instrumentos». (Amós 5, 21-23) |
A Dios hay que presentarle sacrificios De Dios también serían las indicaciones de que en grandes fiestas solemnes hay que matar animales y que deben ser asados «en olor grato a Jehová», por ejemplo, para el día de Año Nuevo; el día de la reconciliación; en los días de las primicias. (Números 28 y 29) Ya durante el éxodo de Egipto, aparentemente Dios habría mandado, matar «un cordero por casa», lo que debería ser repetido cada año. (Éxodo 12, 3-6) Pero también los día cotidianos, Dios quiere ser «calmado» todos los días* así, de manera que se le debe ofrecer «la grasa que cubre las entrañas», «la grosura que cubre los intestinos, y toda la grosura que está sobre las entrañas, y los dos riñones y la grosura que está sobre ellos, y sobre los ijares; y con los riñones quitará la grosura de los intestinos que está sobre el hígado … es ofrenda de olor grato para Jehová». (Levítico 3, 1-17) * Diariamente fueron sacrificados por lo menos dos corderos (Números 28, 3-4) Delante de la entrada al templo se eleva el humo del cadáveres ardiendo y la comunidad canta «Aleluya». (ver por ejemplo Salmo 135, 1-3) Y el Dios residente en el templo dice sobre este lugar: «Este es para siempre el lugar de mi reposo; Aquí habitaré, porque lo he querido». (Salmo 132, 14) |
3) Hombre y animal debe convivir en paz A través del profeta Isaías son develadas las visiones de Dios sobre el futuro Reino de la Paz: Serán vecinos el lobo y el cordero, y el leopardo se echará con el cabrito. El novillo y el cachorro pacerán juntos, y un niño pequeño los conducirá. La vaca y la osa pacerán, y juntas acostarán sus crías, el león como los bueyes comerá paja. Hurgará el niño de pecho en el agujero del áspid, y en la hura de la víbora el recién nacido meterá la mano. Nadie hará daño, nadie hará mal en todo mi santo Monte, porque la tierra estará llena de conocimiento de Yahvé, como cubren las aguas el mar. (Isaías 11, 6-9) Y a través de Jesús habla Dios: «Yo soy el buen pastor; el buen pastor su vida da por las ovejas». (Juan 10, 11) *Al final, la comparación solo tiene sentido si a las ovejas no se las mata después y se las mantiene para la obtención de lana y cantidades menores de productos lácteos, es decir, si como animales domésticos son amigos del hombre. |
El hombre deberá matar al animal según indicaciones exactas La palabra de Dios según el Levítico: El sacerdote «pondrá su mano sobre la cabeza de su ofrenda, y después la degollará delante del tabernáculo». «La cola entera, la quitará a raíz del espinazo» Lo «ofrecerá» a Dios. (Levítico 3, 8-9) Al toro el sacerdote lo: «desollará, y lo dividirá en sus piezas». Su piel y el contenido de su estómago lo «sacará fuera del campamento a un lugar limpio». De la cabra: «Su cabeza la acomodará sobre la leña que está sobre el fuego que habrá encima del altar». (Levítico 1, 11-12) A la paloma: «Le quitará la cabeza», «le quitará el buche y las plumas». «La henderá por sus alas, pero no la dividirá en dos … y su sangre será exprimida sobre la pared del altar». (Levítico 1, 15-17) |
4) Jesús corrige el Antiguo Testamento
Jesús de Nazaret: «Oisteis que fue dicho a los antiguos … pero yo os digo …». (Mateo 5, 21-48) |
Correcciones en el Antiguo Testamento están prohibidas Moisés dijo: «Cuidarás de hacer todo lo que yo te mando; no añadirás a ello, ni de ello quitarás». Moisés se refiere a la enseñanza que él, en parte como profeta, recibió originalmente de Dios. Pero en la mayoría de las veces esta frase se refiere a textos de la Biblia que se le imputan falsamente a él. |
5) Amad a vuestros enemigos, hacedles el bien a aquellos que os odian Dios habla a través del profeta Ezequiel: «¿Quiero yo la muerte del impío? dice Jehová el Señor. ¿No vivirá, si se apartare de sus caminos?». (Ezequiel 18, 23) Los apóstoles Jacobo y Juan dijeron: «Señor, ¿quieres que mandemos que descienda fuego del cielo, como hizo Elías, y los consuma? Entonces volviéndose él, los reprendió, diciendo: Vosotros no sabéis de qué espíritu sois; porque el Hijo del Hombre no ha venido para perder las almas de los hombres, sino para salvarlas». (Lucas 9, 54-56) Jesús de Nazaret: «Oisteis que fue dicho: Amarás a tu prójimo, y aborrecerás a tu enemigo. Pero yo os digo: Amad a vuestros enemigos, bendecid a los que os maldicen, haced bien a los que os aborrecen, y orad por los que os ultrajan y os persiguen; para que sean hijos de su Padre que está en los cielos». (Mateo 5, 43-45) |
Todos los enemigos deben morir. Solo las vírgenes a veces deben ser mantenidas vivas para los soldados Una oración: «De cierto, oh Dios, harás morir al impío … Los aborrezco por completo; Los tengo por enemigos». (Deuteronomio 20, 2-4.13-14.16) También: «Matad, pues, ahora a todos los varones de entre los niños; matad también a toda mujer que haya conocido varón carnalmente. (Números 31, 17-18) * Tesis: Un profeta de Dios no ordena esto. Las órdenes de matar y las reglas para el culto le fueron atribuidos a Moisés, tal como se hizo en otras partes también con palabras del Dios creador. |
6) Pon también la otra mejilla Jesús de Nazaret: «Oisteis que fue dicho: Ojo por ojo, y diente por diente. (Mateo 5, 38-39) |
Pagar con la misma moneda* Dios, según Éxodo 21, 24-25. «Ojo por ojo, diente por diente, mano por mano, pie por pie, quemadura por quemadura, herida por herida, golpe por golpe por golpe». * ¿Habrá cambiado entonces Dios -o Jesús enseña otro Dios? |
7) El hombre se «justifica» por «obras», no solo por la fe. Lo que importa es el actuar correctamente (Santiago 2, 14-24) Jesús: «Cualquiera, pues, que me oye estas palabras, y las hace, le compararé a un hombre prudente, que edificó su casa sobre la roca». (Mateo 7, 24) Jesús: «Así que, todas las cosas que queráis que los hombres hagan con vosotros, así también vosotros haced con ellos; porque esto es la ley y los profetas». (Mateo 7, 14) «Y he aquí un intérprete de la ley se levantó y dijo, para probarle: Maestro, ¿haciendo qué cosa heredaré la vida eterna?». El hombre cita el mandamiento del amor a Dios y al prójimo y Jesús le responde «haz aquello y vivirás». (Lucas 10, 25-27) «El que mira por tu alma …, Y dará al hombre según sus obras». (Proverbios 24, 12) La palabra de Dios a través del profeta Jeremías: «Yo Jehová, que escudriño la mente, que pruebo el corazón, para dar a cada uno según su camino, según el fruto de sus obras». (Jeremías 17, 10) Pablo: «No os engañéis; Dios no puede ser burlado: pues todo lo que el hombre sembrare, eso también segará … (Gálatas 6, 7-9) |
El hombre no es justificado por sus obras, sino solo por la fe. Dios elige y rechaza a quien quiere Pablo: «Por cuanto todos pecaron, y están destituidos de la gloria* de Dios, siendo justificados gratuitamente por su gracia, mediante la redención que es en Cristo Jesús, a quien Dios puso como propiciación por medio de la fe en su sangre, para manifestar su justicia, a causa de haber pasado por alto, en su paciencia, los pecados pasados, con la mira de manifestar en este tiempo su justicia, a fin de que él sea el justo, y el que justifica al que es de la fe de Jesús. (Romanos 3, 23-28) «Así que no depende del que quiere, ni del que corre, sino de Dios que tiene misericordia … (Romanos 9, 16.18-21) * Que nadie deba vanagloriarse por sus obras, no es diferente a otras citas bíblicas. Esto también lo enseña el Antiguo Testamento, Jesús y los profetas, pero en contradicción a Romanos 3, 23 y sig., para el que el actuar correctamente es decisivo para la «salvación». ** Pablo sostiene que los cinco libros de Moisés del Antiguo Testamento, en contraposición a Cristo, son todos la palabra de Dios (p. ej. Romanos 7, 12). Sin embargo, él cree que las exigencias no se pueden cumplir.
*** En la Carta a los Gálatas, Pablo concuerda con Jesús. En la Carta a los Romanos no. |
8) Dios no vive en templos hechos de piedra En Hechos de los Apóstoles se lee: «Si bien el Altísimo no habita en templos hechos de mano, como dice el profeta (Isaías 66, 1-2): El cielo es mi trono, Y la tierra el estrado de mis pies. ¿Qué casa me edificaréis? dice el Señor; ¿O cuál es el lugar de mi reposo?». (Hechos 7, 48-50) |
Dios vive en templos hechos de piedra El rey Salomón, sin embargo, dice: «Yo, por tanto, he determinado ahora edificar casa al nombre de Jehová mi Dios, según lo que Jehová habló a David mi padre, diciendo: Tu hijo, a quien yo pondré en lugar tuyo en tu trono, él edificará casa a mi nombre».
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9) Dios no lleva a la tentación Santiago: «Cuando alguno es tentado, no diga que es tentado de parte de Dios … sino que cada uno es tentado, cuando de su propia concupiscencia es atraído y seducido». (Santiago 1, 13-14) |
Dios no deberá llevarnos a la tentación Jesús habría enseñado la formulación de la oración: «Y no nos metas en tentación*, mas líbranos del mal». (Mateo 6, 9-13) *Tesis: Posiblemente haya aquí una falsificación de una expresión original de Jesús, que pudiese haber sido. «Tú nos guías en la tentación y nos liberas del mal». |
10) Dios no prefiere a nadie La palabra de Dios a través del profeta Amós: «Hijos de Israel, ¿no me sois vosotros como hijos de etíopes, dice Jehová? ¿No hice yo subir a Israel de la tierra de Egipto, y a los filisteos de Caftor, y de Kir a los arameos?».* (Amós 9, 7) * Según esto, Dios también habría «guiado» a otros pueblos. Pablo: «Porque no hay excepción de personas para con Dios». (Romanos 2, 11) Jesús: «No todo el que me dice: Señor, Señor, entrará en el reino de los cielos, sino el que hace la voluntad de mi Padre que está en los cielos.» (Mateo 7, 21) Jesús: «Porque si amáis a los que os aman, ¿qué recompensa tendréis? ¿No hacen lo mismo también los publicanos? (Mateo 5, 46-47) |
Dios aparentemente solo ama a los elegidos y odia a otros Moisés habría dicho: «He aquí, de Jehová tu Dios son los cielos, y los cielos de los cielos, la tierra, y todas las cosas que hay en ella. (Deuteronomio 10, 14-15) Pablo: «Porque no habían aún nacido, ni habían hecho aún ni bien ni mal, para que el propósito de Dios conforme a la elección permaneciese, no por las obras sino por el que llama, se les dijo: El mayor servirá al menor (Génesis 25, 23), como está escrito (Malaquías 1, 2-3): ‘A Jacob amé, mas a Esaú aborrecí’». (Romanos 9, 11-13)
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11) Las autoridades del mundo sojuzgan a los pueblos. El Reino de Dios no tiene nada que ver con esto. «No es de este mundo». Jesús: «Dad a César lo que es de César, y a Dios lo que es de Dios». (Marcos 12, 17) Jesús: «Sabéis que los gobernantes de las naciones se enseñorean de ellas, y los que son grandes ejercen sobre ellas potestad. Pedro y otros apóstoles: «Es necesario obedecer a Dios antes que a los hombres». (Hechos 5, 29) Jesús: «Mi reino no es de este mundo; si mi reino fuera de este mundo, mis servidores pelearían para que yo no fuera entregado …». (Juan 18, 36) |
El uso del poder mundano, también en Estados totalitarios, es justificado con «Dios». Dios gobierna en ira a los pueblos Pablo o uno de sus discípulos: «Sométase toda persona a las autoridades superiores; porque no hay autoridad sino de parte de Dios, y las que hay, por Dios han sido establecidas … es servidor de Dios, vengador para castigar al que hace lo malo». (Romanos 13, 1-4) Supuestamente el profeta Juan: «De su boca (del jinete) sale una espada aguda, para herir con ella a las naciones, y él las regirá con vara de hierro; y él pisa el lagar del vino del furor y de la ira del Dios Todopoderoso.* * Tesis: La enseñanza de una destructiva «ira de Dios» es una falsificación, posiblemente atribuida falsamente a Juan. Los sucesos relatados son efectos en la ley de Siembra y cosecha, que de todos modos es enseñada en la Biblia (Antiguo Testamento, Jesús, Pablo). |
12) Los hijos no deben sufrir la pena que cometieron los padres y sus antepasados (Ezequiel 18, 20) |
Los pecados serán perseguidos en los descendientes de los autores hasta la cuarta generación También esto sería palabra de Dios: «… porque yo soy Jehová tu Dios, fuerte, celoso, que visito la maldad de los padres sobre los hijos hasta la tercera y cuarta generación de los que me aborrecen». |
13) No hay diferencia entre hombre y mujer, esclavo y libre, personas de distinto origen Pablo: «Ya no hay judío ni griego; no hay esclavo ni libre; no hay varón ni mujer; porque todos vosotros sois uno en Cristo Jesús». (Gálatas 3, 28) |
El hombre es la cabeza de la mujer y que la mujer se subordine al hombre Pablo o uno de sus discípulos: «Porque el marido es cabeza de la mujer, así como Cristo es cabeza de la Iglesia … Así que, como la Iglesia está sujeta a Cristo, así también las casadas lo estén a sus maridos en todo». (Efesios 5, 23-24) Los cretenses son calumniados como mentirosos Tito: «Uno de ellos, su propio profeta, dijo: Los cretenses, siempre mentirosos, malas bestias, glotones ociosos. Este testimonio es verdadero». (Tito 1, 12-13) Heridas mortales al propio esclavo con consecuencias mortales, no es algopenado, porque se trata de «dinero propio» Dios, según el Éxodo, habría ordenado: «Si alguno hiriere a su siervo o a su sierva con palo, y muriere bajo su mano, será castigado; mas si sobreviviere por un día o dos, no será castigado, porque es de su propiedad». (Éxodo 21, 20.21) |
14) Mujeres en el seguimiento activo «Aconteció después que Jesús andaba por todas las ciudades y aldeas, predicando y anunciando el evangelio del reino de Dios, y los doce con él, y algunas mujeres que habían sido sanadas …». «Habiendo, pues, resucitado Jesús por la mañana, el primer día de la semana, apareció primeramente a María Magdalena … Yendo ella, lo hizo saber a los que habían estado con él …». (Marcos 16, 9-10) |
La mujer debe guardar silencio Pablo o uno de sus discípulos: «Porque no permito a la mujer enseñar …, sino estar en silencio. Porque Adán fue formado primero, después Eva; y Adán no fue engañado, sino que la mujer, siendo engañada, incurrió en trasgresión. Pero se salvará engendrando hijos, si permaneciere en fe, amor y santificación, con modestia». (1ª de Timoteo 2, 12-15) Comparar: 1ª Espístola a los Corintios; también la mujer apóstol Junia, en Romanos 16, 7, erróneamente traducido por la Iglesia con el nombre masculino de «Junias». |
15) Ningún seguidor de Jesús debe estar por encima de otro Jesús: «Pero vosotros no queráis que os llamen Rabí; porque uno es vuestro Maestro, el Cristo, y todos vosotros sois hermanos. Y no llaméis padre vuestro a nadie en la tierra; porque uno es vuestro Padre, el que está en los cielos*. Ni seáis llamados maestros; porque uno es vuestro Maestro, el Cristo. El que es el mayor de vosotros, sea vuestro siervo». (Mateo 23, 8-11) * Ver también Apocalipsis 15, 4: «Pues solo tú (Dios) eres santo». Ver también Isaías 6, 3. |
Los obispos y maestros son cada vez más destacados Pablo o uno de sus discípulos: «Palabra fiel: Si alguno anhela obispado*, buena obra desea». (1ª de Timoteo 3, 1) Un escritor desconocido: «Obedeced a vuestros pastores, y sujetaos a ellos; porque ellos velan por vuestras almas». (Epístola a los Hebreos 13, 17) * El obispo de Roma será llamado posteriormente «Santo padre» |
16) Teólogos convierten a los humanos en «Hijos del infierno» y hacen inaccesible el Reino de los Cielos Y: «Mas ¡ay de vosotros, escribas y fariseos, hipócritas! porque cerráis el reino de los cielos delante de los hombres; pues ni entráis vosotros, ni dejáis entrar a los que están entrando». Jesús acusa: «¡Ay de vosotros, escribas y fariseos, hipócritas! porque recorréis mar y tierra para hacer un prosélito, y una vez hecho, le hacéis dos veces más hijo del infierno que vosotros». (Mateo 23, 15) |
El que no obedezca a los sacerdotes, deberá morir La Palabra de Dios según el Éxodo: «Y el hombre que procediere con soberbia, no obedeciendo al sacerdote que está para ministrar allí delante de Jehová tu Dios, o al juez, el tal morirá». (Deuteronomio 17, 12) |
17) El Espíritu de la verdad vendrá en el futuro y guiará a los hombres a toda la verdad Jesús: «Aún tengo muchas cosas que deciros, pero ahora no las podéis sobrellevar. Pero cuando venga el Espíritu de la Verdad, él os guiará a toda la verdad; porque no hablará por su propia cuenta, sino que hablará todo lo que oyere, y os hará saber las cosas que habrán de venir». Pablo: «Porque la letra mata, mas el espíritu vivifica». (2ª de Corintios 3, 6) |
La «Sagrada escritura» está inspirada por Dios. Si alguien añadiere a lo que está escrito en este libro, sufrirá plagas (Apocalipsis 22, 18) * Esta frase se refiere al libro del Apocalipsis de Juan. Creyentes bíblicos la aplican a menudo a toda la Biblia. Pablo o uno de sus discípulos: «… las Sagradas Escrituras …, las cuales te pueden hacer sabio para la salvación por la fe que es en Cristo Jesús. Toda la Escritura es inspirada por Dios**, y útil para enseñar, para redargüir, para corregir, para instruir en justicia …». (2ª Timoteo 3, 15-16) ** A pesar de que aquí eventualmente se refiere al Antiguo Testamento (El Nuevo no existía aún), esta parte es referida muchas veces falsamente a toda la Biblia. |
18) Evitar a otros cultos y comunidades y no combatirlas
(1ª de Corintios 10, 14) El consejo del fariseo Gamaliel referente al trato con los primeros cristianos: «Y ahora os digo: Apartaos de estos hombres, y dejadlos; porque si este consejo o esta obra es de los hombres, se desvanecerá; mas si es de Dios, no la podréis destruir; no seáis tal vez hallados luchando contra Dios». «Él (Jesús) expuso otra parábola y dijo: El reino de los cielos es semejante a un hombre que sembró buena semilla en su campo; pero mientras dormían los hombres, vino su enemigo y sembró cizaña entre el trigo, y se fue. Y los siervos le dijeron: ¿Quieres, pues, que vayamos y la arranquemos? Él les dijo: No, no sea que al arrancar la cizaña, arranquéis también con ella el trigo. Dejad crecer juntamente lo uno y lo otro hasta la siega*; y al tiempo de la siega yo diré a los segadores: Recoged primero la cizaña, y atadla en manojos para quemarla; pero recoged el trigo en mi granero». (Mateo 13, 24-30) * Tesis: Jesús advierte a sus apóstoles esperar hasta que la ley de Siembra y cosecha, que también se enseña en el Antiguo Testamento, se haga efectiva. Los «segadores» simbolizan el momento en el cual los efectos se activan: A la siembre positiva le sigue la cosecha positiva, a la siembre negativa le sigue la cosecha negativa. |
Maldecir a otros cultos y comunidades y destruir sus instalaciones La palabra de Dios según el libro del Éxodo: «Guárdate de hacer alianza con los moradores de la tierra donde has de entrar … Derribaréis sus altares, y quebraréis sus estatuas, y cortaréis sus imágenes». (Éxodo 34, 12-13) Pablo: «Mas si aun nosotros, o un ángel del cielo, os anunciare otro evangelio diferente del que os hemos anunciado, sea maldecido».** (Gálatas 1, 8) ** La Iglesia hizo ejecutar durante siglos a los «maldecidos». Pablo: «En el nombre de nuestro Señor Jesucristo, reunidos vosotros y mi espíritu, con el poder de nuestro Señor Jesucristo, el tal sea entregado a Satanás para destrucción de la carne***, a fin de que el espíritu sea salvo en el día del Señor Jesús». *** Este argumento también pudo servir en la Iglesia como justificación para las ejecuciones dentro del marco de la Inquisición. La Palabra de Dios según el Deuteronomio: «La mano de los testigos caerá primero sobre él para matarlo, y después la mano de todo el pueblo; así quitarás el mal de en medio de ti». (Deuteronomio 17, 7) |
19) No usar violencia, reconciliar y perdonar
(Lucas 3, 14) «Entonces Jesús le dijo: Vuelve tu espada a su lugar; porque todos los que tomen espada, a espada perecerán. ¿Acaso piensas que no puedo ahora orar a mi Padre, y que él no me daría más de doce legiones de ángeles?». (Mateo 26, 52-53) «Y Jesús dijo: ´Padre, perdónalos, porque no saben lo que hacen`». (Lucas 23, 34) |
Los soldados deben matar con la ayuda de Dios. El enemigo será despedazado «Y Josué les dijo: No temáis, ni os atemoricéis; sed fuertes y valientes, porque así hará Jehová a todos vuestros enemigos contra los cuales peleáis. (Josué 10, 25-26) «Y Samuel dijo: Como tu espada dejó a las mujeres sin hijos, así tu madre será sin hijo entre las mujeres. Entonces Samuel cortó en pedazos a Agag delante de Jehová en Gilgal». (1ª de Samuel 15, 33) |
20) Perdonaos los unos a los otros, así Dios os perdonará Jesús: «Porque si perdonáis a los hombres sus ofensas, vuestro Padre celestial os perdonará también a vosotros; pero si no perdonáis a los hombres sus ofensas, tampoco vuestro Padre os perdonará vuestras ofensas». (Mateo 6, 14-15) |
El perdón solo ha de ser posible porque fue derramada la sangre de Jesús (Romanos 5, 9) * Jesús, al contrario de Pablo, no enseña la «ira de Dios». La epístola de Juan: «La sangre de Jesucristo, su Hijo, nos limpia de todo pecado». (1ª de Juan 1, 7) |
21) El derramamiento de sangre está contra la voluntad de Dios y recae sobre el perpetrador La palabra de Dios a través del profeta Ezequiel: «Porque la sangre no aborreciste, sangre te perseguirá». (Ezequiel 35, 6) La palabra de Dios a través del profeta: «Que edificáis a Sion con sangre, y a Jerusalén con injusticia. (Miqueas 3, 10-12) |
El derramamiento de sangre es supuestamente la voluntad de Dios También el Cántico de Moisés es considerado palabra de Dios. Ahí se canta: «Engrandeced a nuestro Dios … Embriagaré de sangre mis saetas, Y mi espada devorará carne; en la sangre de los muertos y de los cautivos, en las cabezas de larga cabellera del enemigo». (Deuteronomio 32, 3 y 42) Supuesta palabra de Dios, a través del profeta Balaán: «Dios … Devorará a las naciones enemigas, desmenuzará sus huesos». (Números 24, 8) |
22) Los Diez Mandamientos según el Éxodo 20 y Deuteronomio 5* 1. Yo soy Jehová tu Dios 2. No te debes hacer imagen … 3. No debes tomar el nombre de Jehová tu Dios en vano. 4. Acuérdate del día de reposo (Sabbat) para santificarlo 5. Honra a tu padre y a tu madre 6. No debes matar 7. No debes cometer adulterio 8. No debes hurtar 9. No debes hablar contra tu prójimo falso testimonio 10. No debes codiciar la casa de tu prójimo, no debes codiciar la mujer de tu prójimo, ni su siervo, ni su criada, ni su buey, ni su asno, ni cosa alguna de tu prójimo (Éxodo 20, 1-17; Deuteronomio 5, 1-22) * Dos versiones en las cuales se explica que estos serían los Diez Mandamientos que Dios le habría dado a Moisés durante la alianza. Si en ese entonces hubo solo una alianza con «Diez Mandamientos», ¿entonces cuál de las versiones es la correcta? |
1. No te has de inclinar a ningún otro dios, pues Jehová, Dios celoso es 2. No te harás dioses de fundición 3. La fiesta de los panes sin levadura guardarás 4. Todo primer nacido, mío es … Pero redimirás con cordero el primogénito del asno; y si no lo redimieres, quebrarás su cerviz 5. Seis días trabajarás, mas en el séptimo día descansarás 6. También celebrarás la fiesta de las semanas 7. Tres veces en el año se presentará todo varón tuyo delante de Jehová el Señor, Dios de Israel. Porque yo arrojaré a las naciones (paganos) de tu presencia 8. No ofrecerás cosa leudada junto con la sangre de mi sacrificio 9. Las primicias de los primeros frutos de tu tierra llevarás a la casa de Jehová tu Dios 10. No cocerás el cabrito en la leche de su madre «Y él (Moisés) escribió en tablas las palabras del pacto, los diez mandamientos». (Éxodo, 34, 8-28) |
23) La matanza de un animal es como la matanza de un ser humano En los proverbios del Antiguo Testamento se lee: «El justo cuida de la vida de su bestia; mas el corazón de los impíos es cruel». (Proverbios 12, 10) Y Dios habla a través del profeta Isaías: «El que sacrifica buey es como si matase a un hombre». (Isaías 66, 3) |
Se puede matar a todos los animales
(Hechos 11, 6-9) ** Aquí también se da el permiso para matar a los animales que en el Antiguo Testamento se denominaban «impuros», protegidos por ello de poder comérselos; los demás ya lo estaban anteriormente. |
24) Dios creó a los animales y su espacio vital con sabiduría Alabanza a Dios en el salmo 104: «Tú eres el que envía las fuentes por los arroyos; Van entre los montes; Dan de beber a todas las bestias del campo; Mitigan su sed los asnos monteses … Los montes altos para las cabras monteses; Las peñas, madrigueras para los conejos … ¡Cuán innumerables son tus obras, oh Jehová! Hiciste todas ellas con sabiduría». (Salmo 104, 10-11, 18 y 24) |
La razón de los animales es ser matados En el Nuevo Testamento, Pedro* supuestamente compara maestros heréticos con «animales irracionales, nacidos para presa …». (2ª de Pedro 2, 12 y 22) |
25) La creación de Dios gime y teme En la epístola de Pablo a los romanos se lee: «Porque sabemos que toda la creación gime a una, y a una está con dolores de parto hasta ahora». (Romanos 8, 22) Y del rey Salomón se dice: «El cantaba … de los animales del campo, de pájaros, de reptiles y peces». |
Asesinato en masa de animales en nombre de Dios Para la inauguración del templo, la «comunidad» mata a tantos animales atemorizados, «que por la multitud no se podían contar ni numerar». Solo el rey Salomón habría matado a: «Veintidós mil bueyes y ciento veinte mil ovejas». (1ª de Reyes 8, 5 y 63) Y los creyentes deben cantar ahí: «Jehová, la habitación de tu casa he amado, y el lugar de la morada de tu gloria». (Salmo 26, 8) |
26) ¡Salvad a los animales! Dios encarga a Noé llevarse a animales consigo, «para que tengan vida» cuando se produzca el diluvio. (Génesis 6, 20) |
¡Matad a los animales salvados! A Noé se le imputa haber quemado muchos de los animales salvados, Dice: «Y percibió Jehová olor grato» de los cadáveres quemándose … «Bendijo Dios a Noé y a sus hijos». (Génesis 8, 21; 9, 1) |
27) La resurrección es ya ahora posible Jesús: «El que oye mi palabra, y cree al que me envió, tiene vida eterna; y no vendrá a condenación, mas ha pasado de muerte a vida. (Juan 5, 24-25) «Yo soy la resurrección y la vida; el que cree en mí*, aunque esté muerto, vivirá. Y todo aquel que vive y cree en mí, no morirá eternamente». (Juan 11, 25-26) * Jesús siempre se refiere a una fe activa, no a una pasiva. |
La enseñanza de la «resurrección aquí y ahora» es como gangrena Pablo o uno de sus discípulos sobre los que pensaban de modo distinto en las comunidades: «Y su palabra carcomerá como gangrena; de los cuales son Himeneo y Fileto, que se desviaron de la verdad, diciendo que la resurrección ya se efectuó, y trastornan la fe de algunos». (2ª de Timoteo 2, 17) |
28) Los niños son invitados
Jesús: «Dejad a los niños venir a mí, y no se lo impidáis; porque de los tales es el reino de Dios». |
Los niños de los enemigos deben ser estrellados contra las rocas «Dichoso el que tomare y estrellare tus niños contra la peña». (Salmo 137, 9) |
29) Profecías de sufrimientos futuros. Incluso parientes se matarán entre ellos Jesús sobre el comienzo del tiempo de infortunios: «Y el hermano entregará a la muerte al hermano, y el padre al hijo; y se levantarán los hijos contra los padres, y los matarán. Y seréis aborrecidos de todos por causa de mi nombre». (Marcos 13, 12-13) |
Supuesta llamada de Dios a matar a amigos y parientes Después de la adoración del toro de oro, «El Señor, el Dios de Israel» habría dicho. «Poned cada uno su espada sobre su muslo; pasad y volved de puerta a puerta por el campamento, y matad cada uno a su hermano, y a su amigo, y a su pariente». (Éxodo 32, 27) |
30) Padres e hijos deben reconciliarse La palabra de Dios a través del profeta Malaquías: «He aquí, yo os envío el profeta Elías … Él hará volver el corazón de los padres hacia los hijos, y el corazón de los hijos hacia los padres». (Malaquías 4, 5-6) |
Los padres deben matar a los hijos desobedientes Supuesta palabra de Dios según el Deuteronomio: «Si alguno tuviere un hijo contumaz y rebelde, que no obedeciere a la voz de su padre ni a la voz de su madre … Entonces todos los hombres de su ciudad lo apedrearán, y morirá». (Deuteronomio 21, 18 y 21) |
31) Los pueblos de la Tierra vendrán al Reino de la Paz y transformarán sus espadas en arados
(Fuente: «der Teólogue»- nº 8 ) |
El Reino de la Paz será conquistado supuestamente con la espada contra otros pueblos. Ningún extraño estará más allí En el libro del profeta Joel, originalmente se han transformado las profecías en lo contrario: «Proclamad guerra (santa) … Forjad espadas de vuestros azadones, lanzas de vuestras hoces … Despiértense las naciones, y suban … porque allí me sentaré para juzgar a todas las naciones de alrededor. Echad la hoz, porque la mies está ya madura … Jerusalén será santa, y extraños no pasarán más por ella». (Joel 4, 9-10 y 12 -13 y 17) Esta cita bíblica también pudo haber sido una justificación para las Cruzadas, para el asesinato a espada de todos los musulmanes en Jerusalén en el año 1099. |