Conversación tranquila de @jmfrancas con Juan Benavides Delgado. Catedrático de comunicación de la Universidad Complutense e investigador en temas relacionados con los Medios, la comunicación comercial y corporativa que colabora en la Cátedra de ética económica y empresarial adscrita a la Universidad Pontificia de Comillas en temas de RSC y ética.
blog: http://www.noentiendonada.es
You tube: https://www.youtube.com/channel/UCUGcEzxyMJwuOCBNnjwPDxg?view_as=subscriber
JMF: Juan, ¿cómo está la Universidad española?
Juan Benavides: En general te diría que en una situación complicada y confusa. Complicada porque se han perdido muchos referentes de lo que suponía la Universidad en relación con el conocimiento y la investigación y confusa porque no se sabe, por parte de alumnos y profesores, hacia donde va el futuro tanto laboral como académico e investigador.
JMF: En general la enseñanza en España es muy mediocre, ¿la Universidad lo es también con respeto al resto del mundo?
Juan Benavides: No me atrevería hacer esta afirmación de manera radical. En la Universidad que conozco hay magníficos investigadores y docentes, pero el problema no se puede reducir al hecho exclusivo de la enseñanza. Y si hacemos esta reducción hay que observar la escasa ayuda que sigue teniendo el docente en relación con grupos de alumnos muy numerosos (me refiero a la universidad pública que conozco) unas exigencias prácticas lógicas y una personalización del alumno muy difícil. En ese contexto hablar de calidad de la enseñanza choca inevitablemente con unas condiciones inadecuadas para su desarrollo. Por otro lado comentar que en investigación la universidad española en ámbito de conocimiento en el que me mueve (ciencias sociales) tiene una creatividad y profundidad que no observo en otras universidades europeas o americanas.
JMF: ¿A qué condiciones inadecuadas te refieres?
Juan Benavides: Me refiero a profesores mal pagados con más grupos de alumnos de los que se supone deberían tener, con herramientas y tecnología no siempre al nivel deseado y con grupos de alumnos excesivamente grandes para lo que exige una enseñanza más personalizada.
JMF: La universalización de los estudios universitarios y la creación de universidades en muchas capitales, ¿pueden tener que ver con esto?
Juan Benavides: No te sabría contestar de modo preciso. Puede ser que sí; en España ha habido una proliferación de universidades excesiva y entiendo que también equivocada. A mi modo de ver, puede existir en la opinión publica española o en la propia política que la Universidad debe ser «para todos» y contra más barata mejor. Yo creo que eso es un profundo error. Lo que tiene que ser «para todos» es una buena enseñanza media y especialmente una buena enseñanza profesional. La universidad debe quedar reducida fundamentalmente a la investigación y el conocimiento y profundizar su contacto con la sociedad en forma de retorno y ayuda en todos aquellos temas, problemas, etc., en que se necesite su presencia y aportación.
JMF: No tiene sentido entonces que todos deban hacer carrera universitaria…
Juan Benavides: Puede que no tenga sentido.
JMF: ¿Habría que prestigiar o al menos impulsar la enseñanza profesional?
Juan Benavides: Yo he trabajado en la enseñanza profesional y me parece fundamental esta ámbito de formación. Habría que prestigiar dicha enseñanza e impulsar desde la propia política este tipo de centros.
JMF: Habrás oido hablar del caso Cifuentes y ahora el caso Casado, ¿se regalan títulos en la universidad española?
Juan Benavides: Desgraciadamente si y de otros casos, pero la Universidad española no regala títulos.
JMF: Alguno ya se ve que si… ¿Consideras que es un caso muy atípico que no prejuzga la seriedad de nuestras universidades?
Juan Benavides: Más allá de lo dicho y hablado en los medios, desconozco el caso Cifuentes y menos todavía el caso Casado, pero creo que en muchas informaciones la intencionalidad y la retórica política queda por encima del problema que pueda haber existido -si es que ha existido- en la Universidad o los errores administrativos que se hayan podido producir. Incluso de la propia intencionalidad de cada sujeto en particular. Pero en el debate del que me hablas todos estos temas quedan muchas veces cubiertos por otras estrategias.
JMF: ¿Qué estrategias?
Juan Benavides: Pues las propiamente políticas o de otra naturaleza que desconozco.
JMF: ¿Es un golpe mortal al prestigio de los masters?
Juan Benavides: No creo que sea un golpe mortal a los masters y no tiene por qué serlo. El modelo de Bolonia introdujo en la Universidad unos cambios importantes pero en España no ha habido la inversión necesaria para llevarlo a cabo de forma adecuada.
JMF: ¿Y a qué espera España para hacerlo?
Juan Benavides: Pues no se. Habría que preguntárselo a sus gestores, a sus líderes sociales, a la propia ciudadanía…, no te sabría decir. En cualquier caso, uno de los problemas que tiene la universidad pública -y creo que esta opinión puede no gustar a algunos- es haber metido la política en la Universidad. Creo que eso ha sido un profundo error; el conocimiento y la investigación están por encima de la política y la universidad debe quedar fuera del debate político. Lo contrario nos lleva a caminos sin retorno.
JMF: ¿Cómo despolitizar la universidad? ¿Alguna medida eficaz?
Juan Benavides: El problema de la política lo empecé a estudiar hace muchos años cuando en Europa se investigaba sobre las «crisis de las ideologías» y la dependencia de aquella al lenguaje de éstas. En aquellos años de la Escuela de Frankfurt se dijeron y debatieron muchas ideas y se sacaron conclusiones muy interesantes como la relación entre la política y la propia ideología y el daño que puede derivarse de esta dependencia en otros contextos como el que ahora vivimos con la globalización y las nuevas tecnologías.
JMF: Solo para abrir el melón de una próxima entrevista, tu colaboras en una Cátedra de ética económica y empresarial, ¿estamos saliendo de la crisis con ética?
Juan Benavides: La crisis de la modernidad, la actual «sociedad líquida de Bauman» que tanto se ha discutido…, autores como I. Berlin que distinguió con claridad la «libertad `positiva y la negativa»… creo que son temas que hay que poner sobre la mesa y que podrían ayudar a una clarificación en este tema. La ética es imprescindible para salir de cualquier crisis; el problema es que hemos perdido el ideal de la virtud… algunos autores hablan ya de la «añoranza de lo absoluto»…. sin duda la ética es imprescindible.
JMF: La ética es imprescindible tanto como ausente… ¿El absoluto añorado quién sería?
Juan Benavides: Steiner escribió un libro reciente con este título… y se preguntaba que había quedado después de la muerte de Dios y contestaba que lo habíamos sustituido por otros discursos y que esa sustitución había resultado no sólo ineficaz sino contraproducente. Yo creo que existe un intento de recuperar la espiritualidad -algunos la definen como nueva espiritualidad laica- y eso es bueno, otros, como es mi caso, la integramos en la tradición de Jesús. Es un tema abierto al que habría que dedicarle más tiempo e integrarlo en la educación media de la que antes hemos hablado.
JMF: En definitiva resucitar al Dios que declaró muerto Nietzsche…
Juan Benavides: Nietzsche dijo muchas verdades.
JMF: Entre ellas esta…, pero matar a Dios nos ha salido demasiado caro, ¿no crees?
Juan Benavides: Yo creo que sí y lo estamos sufriendo.
JMF: Gracias Juan, te emplazo, si te dejas, para en otra ocasión hablar de estos temas que son más importantes que el master de Cifuentes. Un abrazo.
Juan Benavides: Un abrazo.