EDWARD
ERECTUS
Pedro Taracena Gil
Para que ERECTUS sea un ensayo en positivo hay que transgredir la doctrina que lo predica en negativo: “El falo en erección, es decir el príapo, está destinado a la procreación”.
El derecho al gozo sexual es exclusivo para perpetuar la especie humana. Abstenerse de él constituye una virtud.
Cuando el hombre hace uso de su razón llega al conocimiento de que el placer y la procreación pueden ir por dos caminos diferentes.
Además, la naturaleza le ha dotado de unos atributos que le permite obtener placer así mismo y compartiendo sensualidad con los demás seres humanos y su entorno natural.
Según la cultura judeocristiana el onanismo y el hedonismo son contrarios a la virtud asceta, que hace meritoria nuestra vida de renuncia al placer en la tierra y ganar el cielo.
ERECTUS es una galería de imágenes que contiene el Catecismo de la Transgresión. Donde la sensualidad, la sexualidad, el erotismo y hasta lo que puede tener de pornografía, son notas en positivo del concierto de las sensaciones eróticas, que constituyen la realización sexual del ser humano.
Colaboran en este propósito la luz, los reflejos, las texturas, la tensión fotográfica…
Y de igual manera un volcán de emociones: el deseo, la libido, el apetito sexual… Ha sido la intención del editor que, desde la primera hasta la última secuencia, Eros hiciera acto de presencia. Si lo ha conseguido o no, es el internauta quien tiene la última palabra… Es un homenaje a la concupiscencia…
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