TRABAJO FIN DE CURSO
Pedro Luis Taracena Gil
Seminario: “Desafíos éticos de nuestro tiempo”
Profesora: Doña Mercedes Galán
Alumno: Pedro Luis Taracena Gil
TRABAJO SOBRE:
ÉTICA Y POBREZA De Peter Singer
Esquema de trabajo
Palabras claves:
Pobreza.
Riqueza.
Cambio climático.
Biodiversidad y medio ambiente.
Análisis de las ideas principales:
Organizaciones no gubernamentales.
UNICEF
Solidaridad.
Generosidad.
Altruismo.
Aplicación a las ideas principales a “nuestros días”.
Nota preliminar: Mi reflexión ha tenido en cuenta tres épocas dentro del concepto de “nuestros días”.
Anterior a la crisis de 2008.
Posterior a la crisis del 2008.
Diciembre de 2019-mayo 2020.
Anterior a la crisis de 2008
Las reflexiones de Peter Singer situándonos “en nuestros días”, anteriores a 2008 podrían corresponder a un planteamiento dirigido a un español de clase media, mayoritaria en aquellos años. Con aportaciones más o menos generosas para aliviar la pobreza extrema del Tercer Mundo. Estas donaciones y ayudas constituyen la versión laica de las Obras de Misericordia, que eran catorce, según los catecismos de Ripalda y Astete. Donde la caridad, la generosidad, el sacrificio por el prójimo, tranquilizaba vuestras conciencias. LAS OBRAS DE MISERICORDIA, en la actualidad y desde 1948, corresponden a la DECLARACIÓN UNIVERSAL DE LOS DERECHOS HUMANO. El altruismo pretende sustituir a la Justicia, pero no lo consigue.
Lejos de descalificar el contenido del trabajo de Peter Singer, lo valoro en su justo precio. Pero los grandes retos que tiene la humanidad en el tema de la pobreza extrema, no se consiguen con donaciones de Amancio Ortega, por generosas que éstas sean. Aunque el altruismo deba de ser anónimo, para demostrar que mi familia está colaborando en este campo altruista, como un ciudadano más, colaboramos con: La Fundación Vicente Ferrer, Médicos sin Fronteras, Cruz Roja, Aldeas Infantiles y puntualmente acudimos a otras llamadas de socorro. Pero esto no quiere decir que no reconozca que este tipo de solidaridad no sea un tapar las carencias del Estado. Hasta aquí la ética no llegaba a la política y la moral era un tanto raquítica. Porque quitarse de lujos superfluos para convertirlos en limosnas no es ni ético ni moral.
Posterior a la crisis del 2008
La España de 2008 era una España de nuevos ricos y la pobreza extrema ni estaba ni se la esperaba. Pero a partir de 2008 en España, los representantes si no legítimos sí legales, confundieron lo legítimo con lo legal y lo legal con lo justo.
En la Unión Europea y en España se legisló al dictado de la Europa de los Mercaderes, en prejuicio de la Europa de los Ciudadanos. La ética desapareció de la vida pública europea. En España se reformó la Constitución para beneficiar a los mercados. El lenguaje exquisito de los letrados y avezados en el conocimiento de las leyes, lo denominaron Reformas Legales. Estas reformas recortaron derechos humanos, sociales y laborales. Y cuando estas reformas, se aplicaron, despojaron a la ciudadanía de todos los derechos conseguidos por el Estado del Bienestar:
La Reforma Laboral ha creado pobreza, desigualdad, hambre y de manera espacial hambruna infantil. Aquello de UNICEF, que nos traía a la memoria las huchas con la cabeza de negritos y chinitos que pedían para la Santa Infancia, ahora, España es un país receptor de aquellas huchas humillantes con pretensión ética y más bien inmorales. Y totalmente injustas.
Los recortes y la privatización de parte de la Sanidad Pública provocaron desatención generalizada, atentando contra la salud de la población.
La Asistencia a la Dependencia se dejó de dotación presupuestaria, provocando muertes prematuras.
La Reforma Laboral, permitía y propiciaba que un trabajado con baja médica legal por enfermedad persistentes, podía ser despedido por causas objetivas y hasta el Tribunal Constitucional lo acogió en su seno legal, faltando a la ética y a la moral. El Gobierno de Coalición abolió esta criminal norma.
Todos estos atentados a la salud del ser humano, con resultado de muerte, son crímenes cometidos por la aplicación de leyes, luego son crímenes legales. Pero crímenes, al fin y al cabo. Es verdad que el concepto crimen solamente debe de contemplarse en los autos de los jueces. Pero La Constitución Española, dice que: “La Justicia emana del pueblo y se aplica en nombre del Rey por magistrados y jueces”.
La nueva ética aplicada estos diez últimos años 2008-2018, lejos de luchar contra la pobreza, ha creado pobreza extrema, nada convencional. Y hambre de todo tipo:
Desigualdad.
Umbral de pobreza crónico.
Éxodo de científicos.
Privatización de parte de la Sanidad Pública.
Residencias de Ancianos entregadas a los Fondos Buitres, sin estructura geriátrica.
Viviendas de propiedad pública, vendidas a Fondos Buitres y expulsados de sus viviendas ciudadanos que pagaban su alquiler.
La corrupción política se ha llevado una parte muy cuantiosa en detrimento de los ciudadanos.
Con este marco referencial el artículo de Peter Singer, desde el punto de vista teórico, es muy válido como reflexión y sensibilización en pro de su llamémosle, causa justa. Pero no solamente España adolece de una ética práctica, sino que Europa ha institucionalizado su propia legalidad para cometer crímenes de lesa humanidad. Sí, estoy de acuerdo que esto se aleja de lo políticamente y diplomáticamente correcto. Pero el acuerdo económico, que no humanitario firmado entre la Unión Europea y el Gobierno de Turquía, es institucionalizar los crímenes de lesa humanidad, quizás tiene otra denominación más suave pero la realidad es tozuda. Un éxodo ingente de refugiados y de emigrantes, huidos de la guerra, del terror, de la muerte, están hacinados en condiciones infrahumanas: mayores, niños, mujeres y hombres… Ante las narices de la Europa cuna de la civilización…
Y lo triste es que en estas condiciones las ONG están supliendo las carencias de los Estados. Y están salvado gente de las fauces del Mediterráneo. Y aquí la predicación del señor Singer sigue teniendo vigor. No está en mi ánimo apartarme ni un ápice del estudio de Peter Singer. Por la conjugación entre la ética y la pobreza en cualquier contexto humano es consustancial.
España comenzó la década 2008-2019, que lejos de ser un país de ciudadanos que podría ayudar al Tercer Mundo, está necesitado de la ayuda de las ONG ubicadas en nuestra propia casa. Con este planteamiento sería un sarcasmo abordar el tema de la ayuda de los españoles al tercer Mundo. Según las acertadas reflexiones del señor Singer.
Diciembre de 2019-mayo 2020
Comenzamos esta nueva década donde el Coronavirus ha abierto un panorama, novísimo, muy trágico, sembrando mucha incertidumbre e inseguridad. Donde la ética y la pobreza, han abonado el terreno para que los muertos se cuenten por decenas de miles. Y a diario por miles y por cientos. Sin apartarnos de que la ética y la pobreza son obra y gracia del Estado. No tardaron las instancias internacionales en definir esta epidemia como pandemia. Quizás era lo única que nos quedaba por globalizar.
A PERRO FLACO, TODO SON PULGAS
Este refrán sabio como todos, nos dice que, si el Estado ha “legalizado” las residencias de ancianos, sin control sanitaria, sin equipamientos y sin profesionales, es decir, que no son geriátricos sino hoteles rentables, es normal que el Coronavirus se haya cebado en esas prisiones de muerte. No hay datos oficiales, pero se estima que el 20% de los muertos proceden de esas terroríficas residencias. Todo este panorama está bajo la cobertura legal, pero esta legalidad ha provocado muertes, pero son muertes legales. Yo me quedo más tranquilo a nivel particular hablar de crímenes legales, pero crímenes que podían haberse minimizado. Como si al perro flaco, le hubieran dado de comer, hubiera él mismo podido ahuyentar a las pulgas.
Todo lo sucedido en este periodo de diciembre a mayo, no se puede negar que el Coronavirus ha sorprendido al Estado sin haber hecho los deberes de prevención en tiempos de paz.
El Estado, ante el torrente de casos de gente contagiada, ha tenido que improvisar hospitales en pabellones de feria, en carpas en terrenos contiguos a hospitales y hasta un palacio de patinaje sobre hielo en una descomunal morgue. El culpable remoto de esta pandemia es el Coronavirus, pero las carencias sanitarias hacen responsable de estas muertes, auténticos crímenes legales, al Estado.
En la crisis de 2008 los triunfantes fueron los bancos y sus rescates financieros. La falta de ética política provocó una pobreza endémica. Los causantes, es decir, la mano negra que lo provocó, salió ileso. Ahora, se está utilizando el dinero según se necesita para luchar contra la falta de ética y moral causantes de la pobreza, pero las vidas que se han quedado por el camino, son irreparables.
“La aplicación de la idea a nuestros días”, es una frase que sigue teniendo vigor. Pero si antes las ayuda del que más tiene sería positivo que ayudara para aliviar la pobreza extrema, ahora y en España, la pobreza extrema nos invade todo el país.
La solución lejos de ser compleja es simple, y quien manda no son los mercados, sino el Coronavirus. Si el Estado de Alarma se aleja de su principal objetivo, que es vencerlo, está claro que su voz de alarma avisará con un repunte para volver a empezar… Aunque parezca increíble el binomio ética-pobreza, también está presente en la crisis de Coronavirus. Recuperar los niveles adecuados de los medios humanos sanitarios y recursos materiales de todo tipo, supone una respuesta ética y moral para salvar vidas y recuperar la salud de la población. Dando prioridad sobre las demás variables.
Se observa que tanto la sensibilidad europea como la de los políticos españoles, están dando prioridad para rescatar a la gente y su economía, con prioridad a los mercados financieros, amorales en casi todos los órdenes.
Se habla del nuevo orden, la nueva normalidad.
NADA SERÁ IGUAL
Se está acuñando esta frase en casi todo el ámbito del Estado. La situación que habíamos llegado con el tema del Medio Ambiente y del Cambio Climático, se estaba haciendo irrespirable.
Los que vivimos en Madrid podemos constatar que el confinamiento nos ha arrebatado la libertad, pero cuando hemos salido del invierno nos hemos encontrado con una primavera nueva:
Desde cualquier punto de la ciudad un poco elevado, podeos divisar la totalidad del horizonte formado por la Sierra de Madrid. Perfilado detrás de las torres más altas. La novedad ha sido que hemos llegado a la polución cero. Sí, cero poluciones en todas las partes de la capital de España. Por mucha nostalgia que esta novedad provoque en algún madrileño.
El verde de las hojas es brillante, sin grasa del humo de las chimeneas y de los tubos de escape de los coches.
Cuando se cruza la calle o se transita por las aceras, se escuchan las pisadas y el movimiento de pies y brazos.
Cuando paseamos nuestra mirada se dirige rápidamente al fondo, al horizonte. No estamos acostumbrados a mirar más allá de nuestras narices.
España debe volver a caminar por los valores éticos y morales de nuestra Constitución, fosilizados en la actualidad.
En España se ha confundido con frecuencia no con buena intención, la legitimidad con la legalidad y la legalidad con la justicia. Como ya he avanzado más arriaba.
Un atentado contra la naturaleza supone una falta de ética y de moral. Dar prioridad a la recuperación económica sobre la salud de la población supone no salir de la pobreza.
La cultura del botellón no es un valor positivo a conservar, sino a desterrar. En las calles, en los parques y en las terrazas, la distancia social la debemos de poner nosotros. No convertir los bares y restaurantes en cubiles donde nos encofren como cuando nos confesábamos.
Mayo del 68 tenía como lema “la imaginación al poder”. En nuestro caso tenemos que renunciar a muchos vicios nacionales contraído desde nuestros ancestros:
No podemos reconstruir el negoció del turismo en base a reconstruir Benidorm con toda su pompa y boato. El turismo de borrachera, que vuelcan sus cloacas directamente al mar convirtiendo las playas en ciénagas. Sin fomentar el turismo del arte como en Italia.
Lejos de poner concertinas criminales en nuestras fronteras, debemos que legalizar y nacionalizar a todos los jóvenes y niños que están en guetos-cárceles, para aumentar la media de edad, como ha hecho Portugal. Con más ética se logra menos pobreza.
La Educación para la Ciudadanía, potenciando la educación cívico-sexual, para crear una juventud sana. Erradicar el machismo y la violencia de género.
Denunciar los arcaicos, caducos y anticonstitucionales Acuerdos con la Santa Sede. En una sociedad civil laica no hay pecados, hay delitos. No hay mandamientos, hay leyes, derechos y deberes.
La ética y la pobreza son magnitudes antagónicas. Cuanto más ética y moral, más justicia e igualdad y menos pobreza.
