El nacionalismo es de derechas

Conversación tranquila con Aarón García Peña (@AaronGarciaPe), poeta. Yo: Aarón, ¿tu eres un  hombre de izquierdas? Aarón García Peña: Soy, posiblemente, uno de los cincuenta que quedan en España. Yo: ¿Y eso?...
IMG_3307

Conversación tranquila con Aarón García Peña (@AaronGarciaPe), poeta.

Yo: Aarón, ¿tu eres un  hombre de izquierdas?

Aarón García Peña: Soy, posiblemente, uno de los cincuenta que quedan en España.

Yo: ¿Y eso?

Aarón García Peña: La defensa del principio de igualdad, más allá de las circunstancias biológicas, territoriales y culturales; ha dejado de existir en los partidos y ciudadanos autodenominados de izquierdas.

Yo: ¿Qué es ser de izquierdas?

Aarón García Peña: Creer en la necesaria existencia de un Estado de Derecho que garantice los derechos fundamentales sin ningún tipo de privilegio por razón de lugar de nacimiento, raza, género o cualquier otra circunstancias diferenciadora.

Yo: ¿Estarás entonces de los nervios viendo ahora la cuestión catalana?

Aarón García Peña: Este asunto es, junto con la mala poesía, lo único que es capaz de hacerme engordar cinco kilos al día.

Yo: ¿Es compatible ser de izquierdas con ser nacionalista?

Aarón García Peña: Este problema de independentismo nacionalista de la mitad de los catalanes, sólo tiene una vía de solución argumentativa: la igualdad, la igualdad en la  soberanía de todos los ciudadanos españoles para con la propiedad del territorio. En el Estado hay tres jefaturas. La Jefatura del Gobierno está en manos democráticas de un grupo político de derechas y, por lo tanto, carece de crédito cuando habla de igualdad porque la derecha cree en los privilegios. Y la Jefatura del Estado y el Mando Supremo de las Fuerzas Armadas están por herencia en propiedad privada y, por lo tanto, no puede hacer una defensa de la igualdad porque la familia Real está legislativamente privilegiada respecto del resto de familias españolas. Este problema histórico, origen de los principios monárquicos de los señoríos feudales, sólo puede resolverse con los principios del republicanismo ilustrado, esos que ha defendido la izquierda desde sus orígenes. Pero, sin embargo, la izquierda, ya sea por necedad o nefasta estrategia política, no sólo no ha aprovechado sus propios principios para liderar la política española sino que, aunque parezca ininteligible, ha vuelto a escribir su propia historia con la sangre de la palabra “vergüenza».

Yo: ¿Luego el nacionalismo es de derechas?

Aarón García Peña: El nacionalismo es de derechas. Tras la Segunda Revolución Industrial y la Revolución Francesa, y tras su consecuente victoria de los burgueses —ayudados por la calaña— sobre la nobleza y el clero, los burgueses esclavizaron a sus iguales con condiciones laborales abusivas; y éstos, hartos de dicha esclavitud, protagonizaron las revoluciones sociales del proletariado y de las filosofías socialista, comunista, anarquista.. ¿Qué hizo la burguesía para contrarrestar dichas revoluciones obreras? Alimentó el sentimiento nacionalistas, y el obrero empuñó ese sentimiento como un cuchillo y lo hundió en su corazón. La izquierda es, filosóficamente, internacionalista.

Yo: ¿Cuál es tu diagnóstico de lo que está pasando en Catalunya?

Aarón García Peña: En toda Europa, tras la crisis iniciada en 2008, está habiendo un auge del nacionalismo en aquellos lugares que tienen una potente burguesía —»padre» del nacionalismo— y una precaria educación en derechos humanos y principios republicanos. Los ricos y privilegiados tiene siempre una tendencia a no querer compartir sus privilegios y riquezas con los pobres.  En Cataluña hay un auge nacionalista, ahora que la derecha catalana ya no puede participar de los gobiernos centrales como en los últimos treinta años y beneficiarse económicamente, y ahora que todo nacionalista en España quiere que pasen desapercibidas las corrupciones de sus representantes públicos. El asunto es, como siempre sucede con los nacionalismos, muy preocupante; porque todo nacionalismo es  base filosófica del fascismo.

Yo: ¿Y como se resuelve ahora?

Aarón García Peña: El asunto del auge nacionalista está siendo preocupante, y cuando el nacionalismo preocupa es porque ya ha empezado a evolucionar a fascismo. ¿Cómo se resuelve un Golpe de Estado por razones de lugar de nacimiento o residencia? ¿Cómo se contrarrestan las mentiras permanentes contra la democracia si, al mismo tiempo, se disfrazan de ésta? Cambiando España: haciendo libres e iguales —sin privilegios territoriales ni culturales— a todos los españoles; modernizando este país institucionalizando todas sus culturas y aboliendo, definitivamente, la monarquía y sus principios que defienden la voluntad del territorio como una proyección de los antiguos reinos. Sustituyendo las fronteras por la palabra “ciudadano».

Yo: ¿Aplicarías el 155 para parar el golpe?                        

Aarón García Peña: Todo ello a medio plazo. A corto plazo, defensa del Estado de Derecho, no sólo porque sea legal y democrático, sino porque es la ley que garantiza la igualdad y libertad de todo ciudadano. El 155 debió haberse aplicado ya con la primera amenaza institucional del Golpe de Estado.

Yo: Gracias Aarón, seguiremos, me interesa mucho tu visión desde la izquierda seria.                        

Aarón García Peña: Un enorme abrazo, José María.

Secciones
EspañaPolítica

Nacido en Manresa, (Barcelona). Licenciado en Ciencias Biológicas (UB). Ex profesor (UAB), ex editor (Editorial Labor), ex político (Ayto de L'Hospitalet y Parlament de Catalunya) y ahora periodista.

Otros: