18 diciembre, 2019
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Uno de los anuncios que más han sorprendido es el reciente aumento al salario mínimo, el cual se aplicará el siguiente año. Y es que, comparado con otros aumentos, este aumento del 20% ha marcado la historia como uno de los incrementos más altos en una sola exhibición.
Si bien esto podría parecer bueno, en realidad no resulta ser del todo bueno pues se dice que este incremento tan alto, y de un solo golpe, podría generar efectos contraproducentes. Es por eso que traemos para ti estas situaciones por las que este incremento no es tan positivo.
- Aumentar los costos de producción: Es sabido que los costos de producción son muy sensibles ante una variación. En este caso, si aumentamos la mano de obra es lógico que estos costos aumentarán, lo que a su vez hará que el precio final de los productos aumenten.
- Inflación: Este aumento generalizado en los costos de producción de productos y servicios, así como su precio final puede llegar a generar inflación. Y es que al subir los precios de forma generalizada estaremos cayendo en una inflación más alta la cual nos restaría poder adquisitivo.
- Menos empleos: Si bien la caída en la generación de empleos comenzó mucho antes del aumento del salario mínimo. El incrementar los costos de mano de obra haría que muchas empresas decidan posponer sus planes de contratar más trabajadores al tener que pagar más salario lo que afectaría aún más la generación de empleos.
- Costos de financiamiento: Una de las respuestas más comunes cuando la inflación suele elevarse es la de modificar las tasas de interés. En caso de incrementarse las tasas de interés, el costo de préstamos sin buró de crédito podrían aumentar haciendo que tu dinero rinda para menos. Se dice que este aumento también se da en créditos como los de Infonavit.
- Menor actividad económica: Algunas empresas, en lugar de aumentar sus costos prefieren amortizar este aumento con una mejor producción. Esto, sumado con la poca inversión de las empresas haría que la actividad económica se mantenga o se reduzca lo que no generaría el beneficio económico esperado.