21 diciembre, 2018
1083 Lecturas
Una compañía o Startup unicornio se distingue por haber cumplido con ciertas características las cuales le valen el boleto para entrar a este club donde solo las empresas más selectas han logrado entrar pues además de distinguirse de las demás adquieren ciertos beneficios con inversionistas e incluso con el mismo mercado.
- Seres mitológicos: Al igual que los unicornios, una compañía unicornio se planteaba como un ser mitológico el cual era casi imposible de llegar a ver debido a que se requerían ciertas condiciones que una compañía difícilmente llegaba a cumplir por lo que se consideraba un mito, al igual que su contraparte fantástica.
- Definido por el dinero: El dinero es el factor que define a una Startup unicornio, aquí se requiere más que simples préstamos en línea rápidos, pues para poder entrar a esta categoría la empresa debía alcanzar un valor de mil millones de dólares en alguna de las etapas designadas para el levantamiento de capital.
- Tecnología disruptiva: La mayoría de los miembros de este exclusivo club destacan por ser empresas que fueron diseñadas para ser disruptivas teniendo como principal categoría de acción la creación tanto de tecnología como de software lo que les permitió un rápido crecimiento tanto en valor como capital y en mercado.
- La era de las redes sociales: De las más de 80 compañías unicornio que se tienen actualmente, la mayoría destaca por haber nacido en la época de las redes sociales y el internet con ideas innovadoras que llegaron para cambiar la forma en que vivimos, tal es el caso de Facebook, Xiaomi, Uber, etc.
- Características únicas: Algo que vale la pena destacar de las Startup unicornio es que la mayoría están diseñadas para ser B2C, es decir, llevar su producto, servicio o valor directamente de la compañía al consumidor, además es curioso ver que la edad promedio de sus fundadores de 34 años, empresarios bastante jóvenes.
Es probable que este selecto club de empresas siga creciendo pues cada vez son más las Startup que han llegado para cambiar la forma en que hacemos una determinada actividad trayéndonos un nuevo producto o servicio disruptivo que deja asombrados tanto a inversionistas como al mercado mismo.
