CRÓNICA DE LA OFRENDA DEL REY DE ESPAÑA AL APÓSTOL SANTIAGO
El Rey pide ayuda al Apóstol en la Ofrenda para “resolver la grave crisis”
El Rey de España ha pedido al Apóstol Santiago, en la Ofrenda Nacional en este 25 de julio, ayuda para “superar las dificultades” que afectan a la vida colectiva y “resolver cuanto antes la grave crisis económica” que atraviesa el país, así como para “erradicar el odio, la violencia y la sinrazón de la barbarie de la guerra”.
Este titular y entradilla se repite todos los años en el día de la festividad de Santiago Apóstol Patrón de España.
Esta ceremonia es anacrónica por muchas razones, aunque bastaría su desaparición obedeciendo al mandato constitucional:
Artículo 16
1. Se garantiza la libertad ideológica, religiosa y de culto de los individuos y las comunidades sin más limitación, en sus manifestaciones, que la necesaria para el mantenimiento del orden público protegido por la ley.
- Nadie podrá ser obligado a declarar sobre su ideología, religión o creencias.
- Ninguna confesión tendrá carácter estatal. Los poderes públicos tendrán en cuenta las creencias religiosas de la sociedad española y mantendrán las consiguientes relaciones de cooperación con la Iglesia Católica y las demás confesiones.
No obstante, es preciso hacer mención de los conceptos que se han aplicado a la realidad española desde 1936 hasta nuestros días. En términos teológicos deberían ser considerados como Los Siete Pecados Capitales del Estado:
- Golpe de Estado contra la República, apoyado por la Iglesia, el Ejercito y el Estado del Vaticano.
- La Guerra Civil se le denomina Cruzada de Liberación Nacional.
- Dictadura bajo el nombre de Nacionalcatolicismo.
- Alianza Trono Altar y Maridaje Iglesia Estado.
- El Rey es de origen divino, luego la Monarquía es inviolable.
- De hecho, el Rey y los obispos se comportan como si España fuera una monarquía católica, apostólica y romana.
- Los Acuerdos pre constitucionales con la Santa Sede, que no Concordato, debían de ser denunciados y adaptados a la Constitución de 1978.
Mi valoración personal es que el Jefe del Estado de la España del siglo XXI, no debería protagonizar semejante esperpento: Que hable a un muerto de hace 20 siglos que presuntamente su cuerpo yace allí, y se le implora que resuelva problemas sociales y políticos de la actualidad.
Este festival es propio de otra dinastía: Franco el Genocida, Fraga Delfín de la Dictadura, Aznar miembro del Triángulo de la Azores y para contemporizar, Feijóo heredero de las Glorias Imperiales Gallegas…
¡Inaudito!